Podemos aprender mucho cuando observamos y escuchamos a los deportistas.
El deporte sea de conjunto o de práctica individual, siempre nos dejará enseñanzas aplicables al ámbito laboral. Su técnica de entrenamiento, su método de superación, su trabajo en equipo, su capacidad para superar las frustraciones, el mantenerse activo y en competencia, la velocidad para tomar las decisiones y el liderazgo situacional para enfrentar con éxito el entorno y necesidades cambiantes, son algunos beneficios.
De la técnica de entrenamiento del deporte podemos destacar la organización, la disciplina, el uso de nuevas tecnologías, el mejoramiento individual y de coordinación como equipo, la fortaleza mental que se gana para superarse y vencer las adversidades, que no serán pocas, como la frustración de no ver inicialmente los avances; el sentir que se está llegando al límite o máximo nivel de habilidad, el manejar la repetición como un fundamento del mejoramiento y superar la monotonía, entre otros.
No existe una persona que más aprenda de superación, sin tener que vivir catástrofes naturales o enfermedades críticas, que un deportista. Porque desde el comienzo aprendió a superar el rechazo de su entrenador o compañeros, para sobrevivir y salir adelante. Porque aprendió a superar la derrota y la inmensa tristeza de entrenar durante toda la vida para presentarse unos pocos segundos y poder perderlo todo con una pequeña distracción en la competencia. Porque una enfermedad o inconveniente físico lo puede eliminar de la competición siguiente y luego el esfuerzo de superación será el doble para recuperar su ritmo. Porque sabe que en el deporte en pocos años habrá perdido su habilidad natural y será reemplazado por deportistas más jóvenes.
Del deporte debemos aprender mucho para aplicarlo en el trabajo, y si seguimos la vida, fracasos y éxitos de la mayoría de deportistas, podremos darnos cuenta de que nos falta mucho por vivir, superar, y mejorar.
Coach Prof. Certificada
Consultora y Formadora