El regalo estrella de San Valentín son los dulces, ¡sorprende a tu pareja con unos cake-pops caseros!
Los cake-pops son unos deliciosos pastelitos bañados en chocolate que esconden un tierno y jugoso interior de bizcocho, ¿quieres saber cómo prepararlos?
Ingredientes para cake-pops de San Valentín (15 unidades)
- 200 g. de bizcocho (pueden ser restos de bizcocho duro)
- 40 g. de queso cremoso para untar
- 80 g. de azúcar glass
- 80 g. de chocolate blanco
- Colorante alimentario de color rojo
- Toppings al gusto para decorar: trocitos de galleta, fideos de chocolate, perlitas de azúcar...
Preparación de cake-pops de San Valentín
1. Trocea el bizcocho y tritúralo ayudándote de un robot de cocina o un molinillo. Disponlo en un bol y mézclalo con el queso y el azúcar, ayudándote de tus manos.
2. Mete la mezcla en el frigorífico al menos media hora.
3. Funde el chocolate en el microondas, en el modo descongelar y removiendo cada medio minuto para evitar que se queme. Deja atemperar y mézclalo con unas gotas de colorante alimentario.
4. Saca la masa de los cake-pops de la nevera y ve formando bolitas del mismo tamaño, dándoles forma de corazón.
5. Pincha cada bola en los palos especiales para cake-pops, si no los tienes, pueden servirte unas simples brochetas de madera.
6. Moja cada cake-pop en el chocolate fundido y ve depositándolos en una bandeja forrada con papel de hornear. Si es necesario, calienta el chocolate de vez en cuando hasta terminar con todos los cake-pops.
7. Espolvorea los cake-pops con el topping elegido, por ambas caras.
8. Lleva tus cake-pops a la nevera hasta que el chocolate se haya endurecido y ¡listos!