El nacimiento o portal de Belén es una representación de la escena del nacimiento de Jesús.
El nacimiento o portal de Belén, como su propio nombre indica, es una representación del nacimiento del Niño Jesús. Los protagonistas de esta imagen son principalmente la figura de San José, la de la Virgen María y la del Niño Jesús en un pesebre. También se suelen colocar una mula y un buey, un ángel, y los tres Reyes Magos que llevan sus regalos al niño, guiados por la estrella de Belén. Una peculiaridad es que el Niño Jesús no se coloca hasta el momento de la llegada de la Navidad.
Con el paso del tiempo, la austeridad de los nacimientos se fue perdiendo y, cada vez, cuentan con más detalles. Así, las figuras pueden ser fijas o animadas, y pueden incluirse elementos, personajes y animales de todos los tipos; como por ejemplo, un molino, unos pastores o unas ovejas. Además, en algunas zonas existen los nacimientos vivientes, en los que distintas personas interpretan sus papeles en el portal.