El coworking se trata de una práctica muy extendida entre freelances en Estados Unidos. ¿En qué consiste?
Consiste en que profesionales que habitualmente no comparten empresa ni sector, comparten un mismo espacio de trabajo. Por supuesto, el objetivo más inmediato es rebajar los gastos, sobre todo cuando somos emprendedores. Y es que el precio aproximado de un espacio de coworking oscila entre 60 y 200 € mensuales.
En un espacio de coworking encontraremos una infraestructura mucho más competitiva que la que tengamos en casa, normalmente todos ofrecen sala de reuniones, así como mobiliario, máquinas impresoras, Internet, luz y agua…
Pero trabajar en un espacio de coworking tiene, además, otras muchas ventajas. En primer lugar nos permitirá separar de forma efectiva la vida personal de la profesional, algo muchas veces muy difíciles para profesionales freelance. Nos obligará a respetar unos horarios fijos y, además, vincularemos nuestro trabajo a un sitio concreto.
Por otro lado, las relaciones profesionales siempre son beneficiosas. Un espacio de coworking impulsa estas relaciones, el intercambio de experiencias e información puede convertirse, en un futuro, en cooperación y proyectos compartidos.
¿Tiene alguna desventaja el coworking? También las tiene, por supuesto, por ejemplo, nos obliga a aceptar unas normas y a compartir espacios de trabajo, como las salas de reuniones, por lo que tendremos que adaptarnos a las necesidades de nuestros compañeros de oficina. Aun así, si ponemos ventajas y desventajas en una balanza, veremos que se inclina claramente hacia el lado de las ventajas.
¿Ya conocías el coworking? ¿Lo practicarías?
