No solo ocurre con Facebook, siempre que nos registramos en una web o descargamos una aplicación aceptamos unos términos de uso y servicio, la mayoría de las veces, sin leer. En este manual nos centraremos en nuestro contrato con Facebook.
¿Qué hace Facebook con nuestros datos? Seguro que cuando completaste tu registro en la red social pasaste por encima los términos de uso. Y es que, estos textos llenos de terminología y conceptos jurídicos, suelen ser difíciles de comprender para la mayor parte de los mortales. Pues bien, aquí tienes un pequeño resumen de las condiciones que has aceptado:
- A pesar de que poseemos los derechos del contenido que publicamos, Facebook se guarda una licencia de uso, es decir, puede utilizar este contenido en aplicaciones que estén conectadas a él. Por eso tu imagen de perfil puede aparecer en el widget de alguna página web, del tipo: “Nos siguen en Facebook”.
- Facebook guarda copias de seguridad del contenido que subimos a la red, así, si eliminamos una publicación, esta no desaparecerá del todo hasta pasado un tiempo, hasta que se renueven las copias de seguridad de sus bases de datos. Pero no solo eso, cuando cerramos nuestra cuenta o Facebook la desactiva, las copias de seguridad siguen ahí, lo que explica que podamos recuperar nuestra cuenta en cualquier momento.
- Las empresas que se anuncian en Facebook pueden usar nuestra fotografía de perfil, nuestro nombre y los contenidos que “nos gustan” para campañas de publicidad y algoritmos de segmentación. Por eso, por ejemplo, nuestros amigos pueden ver qué marcas nos gustan.
- Nuestros datos se almacenan en Estados Unidos y, por lo tanto, se les aplica su legislación, no la del país en el que nos encontremos.
- Facebook no nos garantiza que su plataforma sea segura ni que obtendremos lo que nos ha prometido. Si Facebook incumple alguna cláusula del contrato, este sigue siendo válido.
- Facebook se reserva el derecho a retirar contenidos que consideren que violan las políticas de uso o de propiedad intelectual. Pero además, si reincidimos, es decir, si volvemos a publicar contenido que Facebook piense que debe retirar, nuestra cuenta puede ser desactivada sin previo aviso.
- Facebook puede cambiar las condiciones del servicio en cualquier momento, avisándonos. Si una vez que nos han notificado dichos cambios, seguimos utilizando la red social, se considera que hemos aceptado las nuevas condiciones.
- Si desactivamos nuestra cuenta, Facebook se reserva algunas cláusulas para los “me gusta”, backups y contenidos que hayamos compartido como públicos.
Una vez conocidas las condiciones de uso podemos otorgarles más o menos importancia, pero como usuarios deberíamos estar informados de todas las cláusulas que aceptamos.
Imágenes: Sudhamshu, Thomas Leuthard.