Se colocan los zapatos para los Reyes Magos con el fin de que sepan cuántos niños hay en las casas.
Los zapatos y el carbón dulce son uno de los símbolos más especiales de la noche de reyes, puesto que sin ellos nada sería igual. En España, la tradición establece la necesidad de portarse bien a lo largo del año para recibir regalos de los Reyes Magos y no carbón; dejando además en la noche del 5 de enero unos zapatos muy limpios por cada miembro de la familia para que sus majestades sepan dónde dejar los obsequios y a quién. En otros países, como en México o en Perú, en el interior de los zapatos se coloca una carta escrita con los regalos que se desean recibir.
En Holanda, fue donde comenzó esta tradición de los zapatos para que los niños dieran la bienvenida a su particular Rey Mago el día 6 de diciembre, que recibe el nombre de SinterKlaas. En Italia, sin embargo, esa figura puede resultar más tenebrosa con la llamada Bruja Befana.
