El yogurt es un alimento sano e indicado para dietas de todo tipo.
El yogurt es un alimento de innumerables beneficios en cualquier etapa de la vida. Es especialmente recomendado para bebés, niños, madres embarazadas y personas de la tercera edad, así como después de sufrir problemas digestivos o bucales.
Es un lácteo derivado de la acción de ciertos bacilos que permanecen vivos después de la fermentación y hacen a este producto aún más saludable, ayudando a la nutrición, protección y limpieza del aparato digestivo. El proceso de fermentación confiere al yogurt una mejor asimilación por parte del organismo de la lactosa.
Esta fuente de calcio, vitaminas y minerales, fortalece el sistema inmunológico, disminuye el colesterol, favorece la absorción de grasas, etc. Son cualidades que hacen del yogurt un producto muy apreciado por los nutricionistas y muy importante en diferentes tipos de dietas. En el mercado, hay una gran variedad de yogures. Los desnatados son una buena opción por su bajo contenido calórico en caso de sobrepeso y problemas de colesterol. Por el contrario, los de frutas tienen algo más de calorías pero son más nutritivos. Los de sabores sólo se diferencian en el aporte de un alto contenido en colorantes. Los “bio” son procedentes de ganadería ecológica, por lo que la calidad y beneficios del yogurt son mayores. Los yogures no refrigerados o sin bacterias vivas, carecen de las propiedades beneficiosas que éstas aportan. En los yogures refrigerados, las bacterias van disminuyendo su actividad a medida que se aproxima la fecha de caducidad.
Por todo ello, los expertos recomiendan el consumo de dos a cuatro yogures diarios.