Las estrofas de cuatro versos son: Copla, Seguidilla, Cuarteto, Redondilla, Cuarteta y Serventesio.
Las estrofas de cuatro versos son:
-La Copla. Está conformada por cuatro versos de arte menor (generalmente, octosílabos). Los pares tienen rima asonante, quedando suelto los impares.
Anda y ve y dile a tu madre
si no me quiere por pobre,
que el mundo da muchas vueltas,
y ayer se cayó una torre.
(Anónimo).
-La Seguidilla. Está compuesta por cuatro versos de arte menor, el primero y el tercero son heptasílabos, segundo y cuarto tienen cinco o seis sílabas métricas. Aquéllos quedan sueltos y éstos pueden poseer rima asonante o consonante.
Pues andáis en las palmas,
ángeles santos,
que se duerme mi niño,
¡tened los ramos!.
(Lope de Vega).
En ocasiones, la Seguidilla finaliza con un bordón (tres versos, rimando en asonancia los impares y quedando suelto el segundo).
Una fiesta se hace
con tres personas:
uno baila, otro canta
y el otro toca.
Ya me olvidaba
de los que dicen “ole”
y tocan palmas.
(Manuel Machado).
-El Cuarteto. Esta estrofa se divide en cuatro versos endecasílabos (arte mayor), con rima consonante.
¿Qué tengo yo que mi amistad procuras?
¿Qué interés se te sigue Jesús, mío,
que a mi puerta, cubierto de rocío,
pasas las noches del invierno oscuras?
(Lope de Vega).
-Redondilla y Cuarteta. Ambas son estrofas de cuatro versos octosílabos (arte menor) y con rima consonante. En la Redondilla, riman primer y cuarto verso, así como segundo con tercero. Por el contrario, en la Cuarteta el esquema es: a-b-a-b.
-Serventesio. Son cuatro versos endecasílabos (once sílabas métricas), con rima consonante (primero con tercero y segundo con cuarto).
Yo soy aquel que ayer no más decía
el verso azul y la canción profana,
en cuya noche un ruiseñor había
que era alondra de luz por la mañana.
(Rubén Darío).
