Se trata de una gastroenteritis que sufre el turista por culpa de bacterias, virus o parásitos existentes en el país visitado.
La diarrea del viajero la sufren personas sanas que han viajado a países con alto riesgo de contraer algún virus o parásito que el cuerpo no tolera. En la mayoría de los casos es un proceso benigno y de tiempo limitado.
El primer síntoma suele aparecer al poco tiempo de estancia, con una diarrea brusca. Este estado puede ir acompañado de dolor de cabeza, náuseas, vómitos, cansancio, fiebre y dolor abdominal. Suele durar unos cuatro días.
No es una enfermedad grave pero puede causar deshidratación. En algunos casos las heces pueden aparecer con algo de sangre.
Los ancianos y los niños son más propensos a sufrirla.