“No puedo irme de vacaciones este año porque estoy a dos velas”, ¿de dónde viene esta expresión?
Estar a dos velas es una expresión muy utilizada en España y, tal y como apunta la RAE, es una locución verbal coloquial que se utiliza cuando hablamos de:
Sufrir carencia o escasez de dinero.
Es decir, cuando decimos que estamos a dos velas, nos referimos a que no tenemos dinero, a que nuestros bolsillos están vacíos.
Para encontrar su origen tenemos que remontarnos unas décadas atrás, a cuando el juego estaba muy limitado desde el punto de vista legal. En este tiempo, en las timbas y partidas de cartas clandestinas, el banquero contaba los puntos y el dinero a la luz de dos velas, colocadas una a cada lado de la mesa. En este contexto, si un jugador tenía un golpe de suerte y se hacía con todo el dinero de la banca, la dejaba literalmente a dos velas, sin nada de dinero y, por lo tanto, con un espacio vacío entre las dos velas.
Imagen: r-z.
