El contacto entre alumnos o adversarios es muy estrecho y, por ello que, el Judo requiere de ciertos hábitos de higiene personal que se establecen en las reglas de este deporte.
Estas reglas higiénicas son consideradas tan importantes como cualquier otra. La explicación a esta importancia recae tanto en razones de seguridad como de salud.
El judoca tiene que cuidar su higiene personal y su aspecto físico dentro del tatami. El pelo tiene que estar sujeto, los complementos decorativos o adornos, como pendientes o collares no están permitidos. Los pies y las manos deben estar limpios y aseados. Las uñas tanto de los pies como de las manos deben ser cortas.
Con esto, evitaremos lesionar o hacer daño a nuestro compañero durante un combate. Con las uñas podríamos arañar, el pelo podría resultar molesto y ser un estorbo en la lucha, los pendientes podrían ocasionar daño a uno mismo, al igual que las pulseras. Por todo ello, el Judo ha incluido en su reglamento un apartado específico para el cuidado y seguridad de los judocas practicantes.