La alimentación es un factor fundamental para la nuestra salud, tanto física como mental. En este manual te ofrecemos una serie de consejos para controlar el estrés y la ansiedad a través de la dieta diaria.
La aparición de ansiedad y estrés está estrechamente relacionada con la alimentación diaria, de hecho, una de las principales causas del estrés es la bajada en sangre de los niveles de glucosa, que dan como resultado nerviosismo, falta de concentración e irritabilidad. A pesar de ello, no debemos pensar que la solución está en consumir alimentos llenos de azúcar, pues en las situaciones de estrés alto generamos más adrenalina, lo que acelera nuestro metabolismo y el consumo de carbohidratos, produciendo el deseo de comer más y la conocida ansiedad. ¿Qué alimentos debemos tomar para reducir el estrés?
Pues básicamente alimentos con un índice glucémico bajo, hidratos de carbono de asimilación lenta, que van consumiéndose poco a poco y ayudan a mantener nuestros niveles energéticos estables, reduciendo la ansiedad. Estos alimentos son los cereales integrales, las verduras y las legumbres.
En una dieta anti-estrés también son recomendables los alimentos ricos en vitamina C, pues en situaciones de estrés, nuestro organismo consume más vitamina C. Esta vitamina la encontramos en los cítricos y las verduras de hoja verde, como las espinacas.
Asimismo, son importantes los alimentos ricos en magnesio, que tiene un efecto relajante en el sistema nervioso. Debemos aumentar el consumo, por lo tanto, de almendras, nueces, garbanzos o soja.
Imagen: gamene