Nos hemos decidido, vamos a cultivar un huerto, pero… ¿ecológico o convencional? ¿Qué ventajas tiene hacerlo de forma más saludable?
Estamos recuperando espacios para las huertas, especialmente en las ciudades. Los huertos urbanos están de moda, combinan el trabajo de la tierra y el desarrollo de habilidades sociales y el establecimiento de relaciones interpersonales.
Pero antes de todo esto, tenemos que decidir si cultivamos al tierra con los métodos y usos convencionales o en ecológico. La agricultura ecológica es respetuosa con el medio ambiente, hace un aprovechamiento óptimo de los recursos y fomenta el desarrollo sostenible frente a la agricultura convencional que es más agresiva con el medio en el que se desarrolla.
Por ejemplo, la fertilidad del suelo de nuestra huerta, si la trabajamos de forma ecológica, se incrementa, en convencional, disminuye y es mucho menos contaminante ya que no se utilizan productos químicos. No podemos ni debemos olvidar, que todo lo que utilizamos, aunque no en su totalidad, parte, queda de forma residual en los frutos que posteriormente comemos. Garantizamos la conservación de su valor nutritivo, en proteínas y vitaminas, son verduras y hortalizas y frutas más saludables. Además, los beneficios ecológicos y sociales son mayores que los de la convencional y el coste económico, menor. En conclusión, una huerta en ecológico, solo tiene ventajas, frente a la convencional y convierte nuestro ocio en un beneficio social y medioambiental.