La métrica tiene como objetivo estudiar los versos y las combinaciones de éstos.
La métrica se ocupa de la naturaleza, propiedades, estructura y medidas de los versos, así como de sus combinaciones.
La unidad métrica es el verso, que puede definirse como un trozo breve de discurso al que sigue una pausa. Ésta no debe coincidir, necesariamente, con la pausa sintáctica. Tras cada una de las pausas, aparecen nuevos versos y así, sucesivamente, hasta completar las estrofas y los poemas. El Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua lo define como "Palabra o conjunto de palabras sujetas a medida o cadencia, o sólo a cadencia".
Puede distinguirse entre verso métrico tradicional y verso libre. El primero de ellos se vale de una serie de artificios para lograr un efecto rítmico (número de sílabas, fonemas que riman, pausas...). Los versos libres, por contra, se alejan de este tipo de recursos y de las pautas generales de rima y metro.
La métrica estudia las clases de rimas que podemos encontrarnos, la consonante y la asonante. Igualmente, diferencia entre versos de arte mayor o menor, dependiendo del número de sílabas métricas que posean. Por ejemplo, los endecasílabos, dodecasílabos y alejandrinos son versos de arte mayor. Por último, esta disciplina analiza las estrofas, los poemas y las denominaciones que poseen (pareados, coplas, tercetos, seguidillas, sonetos, redondillas...).