La avena es uno de los cereales más completos y nutritivos que podemos brindarle a nuestro cuerpo, pero además tiene propiedades calmantes y regeneradoras para la piel.
Ya conocemos las ventajas de levantarse de la cama y prepararse un buen desayuno, pues hoy te traemos el alimento perfecto para este momento del día: la avena.
La avena posee innumerables cualidades para nuestro organismo, desde el punto de vista nutritivo no solo es rica en hidratos de carbono complejos y proteínas, sino también en fibra, tanto insoluble, que ayuda a regular el tránsito intestinal, como soluble, que favorece la reducción del colesterol, pues dificulta su absorción. Pero además, también nos ayuda a reducir el colesterol gracias a su contenido en grasas omega 6 y sus propiedades diuréticas la hacen útil para tratar enfermedades reumáticas.
La fibra de la avena es capaz además de absorber partículas poco beneficiosas para nuestro organismo que podrían favorecer la aparición del cáncer, especialmente de colon. Protege las mucosas digestivas y es muy saciante, regula el apetito y calma la sensación de hambre y la ansiedad, lo que la convierte en un alimento ideal para dietas de adelgazamiento.
Asimismo, es un cereal antioxidante, rico en aminoácidos esenciales, vitaminas del grupo B y minerales: zinc, sicilio, yodo, magnesio, hierro y calcio, por lo que es muy beneficiosa en casos de anemia y osteoporosis.
Pero la avena, como ya hemos mencionado, no es solo nutritiva, sino que también tiene propiedades regenerativas y calmantes para la piel. Los jabones y cremas a base de avena alivian la dermatitis, las molestias de una piel extremadamente sensible, la psoriasis y las urticarias y son perfectos para cuidar la piel de los más pequeños de la casa.
Imágenes: Anne Worner, nate steiner, familymwr.