Sí. De esta forma, en vez de tres o cuatro vehículo funcionando sólo consume uno.
Puedes compartir coche en tus desplazamientos diarios (por ejemplo para ir y volver del trabajo o de la universidad), o en tus viajes más largos (por ejemplo entre dos pueblos o ciudades distantes).
Compartir coche tiene una serie de ventajas:
- Reducirás tus emisiones de CO2 por lo menos en un 50%.
- Ahorrarás dinero en combustible.
- Disminuir la contaminación y el consumo energético producido por los vehículos privados.
Cuando no se conduce se puede aprovechar el tiempo de viaje en realizar alguna actividad o simplemente compartirlo con el resto de ocupantes.
En Internet existen guías para compartir el coche: