Ya conocemos el poder de Internet y, por lo tanto, la importancia de posicionar nuestro negocio o nuestra marca personal, pues bien, ¿cómo podemos facilitar la búsqueda?
Seguro que si haces una lista de términos que se identifiquen con tu negocio o persona te saldrán cientos, sin embargo, tenemos que ser selectivos, tenemos que elegir la palabra clave que mejor nos identifique y, a la vez, sea más accesible para nuestro público objetivo.
Lo más recomendable es ponerse en el lugar del target, de las personas que tienen que encontrarnos a través de buscadores web: ¿cómo buscaría yo?, ¿qué palabras escogería? Una vez que hayamos escogido nuestras palabras clave es también muy útil revistar estadísticas para comprobar que, efectivamente, los términos que hemos seleccionado son los más rentables para nuestro negocio. Por ejemplo, si tenemos una empresa de odontología no tiene mucho sentido que escojamos ‘odontólogo’ como palabra clave, pues podemos deducir que la mayoría de nuestros clientes buscarán ‘dentista’.
¿Qué tiene la palabra clave perfecta? Básicamente estas tres características:
- Gran volumen de búsquedas.
- Baja competencia: al introducir la palabra clave en el buscador salen pocas opciones.
- Alta tasa de conversión: la búsqueda con esta palabra clave no solo es satisfecha, sino que además hace que consigamos nuestro objetivo, ya sea de venta, de contacto o de cualquier otro tipo.
Es difícil que el término de búsqueda por el que nos decantemos cumpla estas tres premisas, pero es muy recomendable que, al menos, cumpla dos de ellas.
Si ya tienes tus palabras clave, analízalas y comprueba que son las idóneas y si no, ya tienes unos parámetros para encontrarlas: ¡manos a la obra!
Imagen: cambodia4kidsorg.