Tres tonos, una mirada espectacular. Te enseñamos cómo conseguirlo.
Aplicar la sombra de ojos no es una tarea fácil, sin embargo, podemos conseguir un resultado profesional siguiendo unas sencillas pautas.
El primer paso es aplicar una base del mismo tono de nuestra piel en todo el párpado, puede servirnos la misma base que utilizamos para maquillar el rostro, para conseguir una piel lisa y uniforme, a la vez que alargamos la duración de las sombras.
Normalmente las paletas de sobras cuentan con tres tonos, escoge el tono más oscuro para marcar la parte externa del párpado móvil en forma de V y, después, aplica el tono medio en el centro del párpado móvil. Difumina bien ambas sombras de forma que quede un degradado entre una y otra. Aplica el tono más claro en el lacrimal, para iluminar y agrandar la mirada, y en el hueso de la ceja.
Termina tu maquillaje con una línea de lápiz negro o marrón pegada a las pestañas, muy fina, y aplica una máscara de pestañas del mismo tono que el lápiz. Y ¡lista para deslumbrar!
Imagen: Monimix