Uno de los elementos más destacados del "skyline" de Londres es la cúpula de la catedral de San Pablo, la segunda más grande del mundo.
Este edificio religioso ocupa el lugar en el que se sitúa la edificación de la primera iglesia de Inglaterra, allá por el siglo séptimo después de Cristo. La idea era convertir a los anglosajones, el pueblo bárbaro de origen germano que llegó a las islas británicas desde Europa. Su dominio duró hasta la invasión de los Normandos, venidos desde la actual Francia. Son por tanto los ingleses un pueblo surgido de las idas y venidas de tantos antiguos europeos, aunque permenecer en las islas les han ayudado a forjar un carácter propio fuerte, empezando por su propia moneda y su manía de conducir a la izquierda hasta la característica "flema inglesa".
Hablábamos de la Catedral. Reconstruida después del gran incendio, hoy muestra varios estilos arquitectónicos y variadas obras de arte. Además, su cúpula es la segunda más grande del mundo después de la Basílica de San Pedro del Vaticano. La visita permite, desde recorrer algunas criptas, hasta subir a la cúpula y disfrutar de una vistas magníficas de Londres. Además allí descansa gente como Nelson o Wellington, tan importantes en la Historia de España. Si Diana de Gales se casó allí, y el edificio aguantó los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, bien merece tu visita.
Fotos: Manuel González