El ahorro del agua es una máxima en la agricultura ecológica. El acolchado nos permitirá gestionar de forma eficaz y sostenible el agua que necesitamos para nuestra huerta.
El acolchado, también conocido como mulching, es una práctica en la agricultura ecológica, que tiene una doble función: gestionar el gasto de agua y fertilizar el suelo.
Se trata de cubrir el espacio con material orgánico y supone un gran beneficio para el huerto, ya que lo protege y lo nutre. Si pensamos, el único espacio de la tierra, que no tiene cobertura de algún tipo, es el desierto y no queremos convertir en un desierto nuestra huerta.
Los materiales que podemos utilizar para nuestro acolchado son los helechos, paja, henos, matas, hierba joven... Cualquier material orgánico es válido y debemos prepararlo durante la primavera, ya que durante esta época, la tierra está caliente.
El acolchado, permitirá un ahorro del agua, la transformación del material orgánico aportado en nutrientes para el suelo, mejorando sus condiciones físicas. Limita el desarrollo de las malas hierbas y lo protege de las radiaciones solares. Sus beneficios son químicos, biológicos y físicos.